Puede que os sorprenda el título de este post. Pero es que las cosas no salen siempre como queremos, y a veces, ni como tenemos organizadas.
Mi viaje a Oporto estaba previsto desde hace meses. Sabia las fechas, mi participación en la feria junto al resto del equipo.
Por circunstancias mi viaje se resolvió una semana antes de la fecha.
Se venía conmigo un buen amigo a compartir está aventura. Nos íbamos de Madrid a Oporto en coche y de paso podíamos transportar la gran cantidad de material que necesitábamos en la feria (aerografo, rodillos, dentales, 15 bolsas de nubes, 12 cajas de crispis y un larguísimo etc).
Pero ahí estaba el destino para cambiar de nuevo mis planes.
Mi amigo me dice 8 horas antes de la salida, que no viene. Me quedé muda y reconozco que al principio no entendí lo que me estaba diciendo. No me lo quería creer.
Eso sí, me seguía dejando su coche para poder irme yo con todos los bártulos.
Esto me generó mucha angustia. Porque aunque estoy acostumbrada a hacer 500km de Sevilla a mi querida Garrucha, esto era otra cosa.
Conducir un coche que no conoces, salir de Madrid con esa amplia colección de M-30, M-40, M-50 por una carretera también incógnita para mi y 600 km por delante y lo peor: sola.
Así que me acosté y no podía dormir de la preocupación porque a Oporto tenía que ir sí o sí. Primero porque ya tenía un compromiso adquirido y segundo porque yo tenía gran parte del material que necesitaban mi Mis compañeras.
Yo cumplo mi palabra. Tenia que ir a Oporto. Pero no conduciendo yo.
Pasaron varias ideas por mi cabeza. Una de ellas era en Blablacar. Sí no conocéis la página os sugiero que la visiteis. Es un portal que pone en contacto a personas para compartir viajes en coche. Pero está opción tenía dos problemas. Primero que al ser ya viernes todos los coches estaban completos (en la franja horaria que yo necesitaba), y segundo el gran volumen de mis maletas. Así que descarté está opción.
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| Parte del material que llevo desde Sevilla para el Cake Alive 2013 |
Autobús. Descartado nada más ver la cantidad de horas de viaje. Demasiado para este cuerpo
Y aquí vino la solución: podía irme en tren-hotel hasta Vigo y de allí coger otro tren para Oporto.
Así que salí ayer de Madrid a las 22.30 pm
Y aquí estoy. En la estación de tren de Vigo a las 7.39 am esperando el próximo tren a Oporto que sale a las 9.02 am
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| Tras toda la noche de viaje, aquí me encuentro en la estación de Vigo tomando un té. |
Es cierto que todos los contratiempos tienen solución. Todos. Aunque a veces esa solución te cueste alguna noche sin dormir. Y a mi dos, porque dormir, he dormido poco. Pero ya tendré tiempo para descansar.
Está mañana ya estaré en el Cake Alive. Llegó a las 10.15 y mi masterclass es a las 11.00!!! Llego justita :). Pero llegó a tiempo.
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| Tren "grafiteado" que me llevará a Oporto desde Vigo. |
Así que espero poder contaros muchas cosas de la feria!!!.
Feliz finde!!!
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